Una de las grandes novedades de COELBO®, la nueva serie de presostatos de caudal con reductor de presión integrado. Pero vayamos paso a paso, veamos cómo funciona un presscontrol, y qué cambia con esta innovación de la empresa española.
¿Cómo funciona un control de prensa?
El clásico presostato (o presscontrol) funciona activando la bomba eléctrica cuando la presión cae en el sistema tras una demanda de agua.
Tenemos por tanto una presión x en el sistema, cuando abrimos un grifo esta presión empieza a bajar hasta un valor mínimo que activa la bomba.
Los primeros pressmandos tenían una presión de arranque fija, luego aparecieron los primeros sistemas mecánicos que, gracias a la intervención de un tornillo, nos permitían regular la presión de arranque.
Pero, ¿qué sucede una vez que se enciende la bomba?
Con el presscontrol clásico, una vez activada la bomba se pondrá a trabajar a la máxima presión que sea capaz de desarrollar. Esto hace que si la bomba no está bien dimensionada podríamos tener un exceso de presión en el sistema, con todos los problemas que esto puede conllevar.
¿Cuándo se apaga el control de prensa?
El apagado del presscontrol está ligado a la falta de caudal, por lo que cuando se cierra la demanda de agua, se cierra una válvula dentro del dispositivo que determina el apagado de la propia bomba.
¿Cuál es la novedad que aporta el reductor de presión?
En los nuevos dispositivos COELBO® la presencia de un reductor de presión nos permite configurar la presión máxima de funcionamiento de una bomba, evitando así que ésta entre a trabajar al máximo, por lo que tendremos una presión de funcionamiento constante y correctamente ajustada según las necesidades. de la 'planta'.
Pongamos un ejemplo...
Supongamos que instalamos una bomba eléctrica multietapa HYDRAMG150-6 de HYDRALIT®, que es una bomba que desarrolla buenos caudales frente a excelentes presiones, llegando a casi 8 BAR, para una aplicación doméstica, para una casa y conectada a un sistema de riego.
Si fuéramos a instalar un control de prensa clásico nos encontraríamos con una presión excesiva en comparación con los requisitos del sistema.
Al instalar un DPR en su lugar, podríamos ajustar la presión máxima de funcionamiento, por ejemplo a 4 BAR, así como ajustar la presión de arranque. De esta forma podremos determinar un rango de funcionamiento correcto en función de la necesidad.